Algunas de mis manías personales

Podría presentarme dando los datos habituales de filiación, adornando mi dni con serum o inventando una biografía —al fin y al cabo todas lo son— que me quedase un par de tallas más grande que la verdadera. Podría haber dicho que fui maestro de infantil y proponer algunas de las muchas anécdotas que la escuela me regaló.

Pero he preferido en lugar de tanta formalidad, presentarme contando seis de mis manías curiosas, de esas de las que todos tenemos una colección: