¿Cuántas veces tiene
que repetirse un sueño
para que suceda?
No sé,
nunca he sabido,
sigo sin saberlo,
si la energía y el deseo
que se entregan a los sueños
pueden, de alguna manera,
modificar la realidad
y sustituirla por otra.
Ella está de espaldas
y, al poner mi mano en su hombro,
se gira y me abraza.
Su cabeza se reclina en mi pecho
y entre todos los brazos
surge un ocho, el infinito.
En cada borbotón
estamos más cerca;
en cada ruido que prorrumpe,
la respiración se acompasa;
en cada pompa que salta
se difuminan en el contacto
los límites de los cuerpos.
El universo toma su temperatura
y el paisaje se aleja
hasta desaparecer.
Ninguno de los dos dice nada
y la vida parece un soplo,
un aliento que roza las caras
y no hay nada que decir.
Entretanto, hierve el agua.
¿Cuántas veces tiene
que repetirse un sueño
para que suceda?
No sé, nunca he sabido,
sigo sin saber.
Pero he descubierto contigo
que hay cosas que
con una sola vez que sucedan
se repiten para siempre
en los sueños.
Y cada vez que hierve el agua.
Deja una respuesta