Entelequia
Hubo magia. Eso dicen,
pero yo estaba fuera,
en el día siguiente:
el 7 de enero.
En mí habita el horror de los regalos.
La muñeca sin párpados,
la caja vacía,
las pilas descargadas.
Estoy en la fractura de las muñecas rotas.
En mí, el caramelo envenenado,
la barba postiza.
Soy lo que sobra,
lo que no se recicla, lo que se amontona,
la basura:
una mujer, no joven.
Nadie.
El despojo de este país,
otro olvido,
un tumor social.
En realidad no existo: soy una invención
basada en hechos reales.
De mí habla la mitad de un telediario,
titulares, cifras, porcentajes.
Pero soy un número goloso,
venid a lamerme, perritos,
chupad mis lamentos,
jugad con ellos entre ministros.
Os dejo la desesperación:
haced un buen caldo con mis miserias.
Sois unos cabrones.
Eva Vaz (1972, Huelva, España). Ruido de venenos, Ed. Crecida, 2013.
Magnífico.